Es Dios quien revela la verdad en nuestros corazones. El inicuo será revelado para tentar y decepcionar al Pueblo de Dios para vivir y andar conforme a sus actividades engañosas y de iniquidad que proceden directamente de Satanás. La razón por la cual va a venir con tanta decepción es para probar a los más fieles y aún a los escogidos. (Marcos 13:22)
Es vital que nos capacitemos en recibir el amor de la verdad si deseamos ser salvos. Salvo no es un asunto de solamente hacer una oración, sino se trata de seguir confesando y seguir creyendo. Tenemos que guardar la puerta de la verdad del Señor hasta el fin.
La iniquidad se aumenta porque la humanidad le encanta la oscuridad en lugar de la verdad. Cuando Dios revela la verdad a nuestras vidas, en realidad es algo que nuestra naturaleza caída no le gusta. Es como la persona que no cuida su salud o guarda su mente de cosas contaminadas. Si no mantenemos un punto de vista claro de que tan importante es aborrecer lo malo, cuando viene la verdad, se causan choques dentro de nosotros. La verdad es dolorosa a nuestra naturaleza humana, es inconveniente a nuestros planes y a los deseos humanos que deseamos cumplir en la vida.
La verdad es que lo que nos hace libre es cuando la obedecemos. Es la verdad que nos lleva a una vida más como Cristo. La verdad nos muestra como somos al 100% por dentro y por fuera. La verdad está viendo cada área y nada puede ser escondido de ella. Si usted o yo queremos ver como estamos, vamos a poner nuestras vidas a la luz de la verdad. La verdad de integridad es 100% integro y no al 99.999999999%. Siendo integro significa que vivamos con una buena conciencia delante de Dios y la gente, sin una falla. ¿Estamos allí? La verdad de la administración financiera es 100%. ¿Hemos cumplido con lo que Dios ha deseado financieramente para nosotros? ¿Cuándo Dios dice da, damos?, ¿Lo hacemos sin pensar en nuestras necesidades y sin medir si va a ser posible dar o no?
Cuando la verdad está revelada, la naturaleza humana se enoja porque le gusta como está, y al ser revelada la verdad hay un desafío en cómo esta naturaleza está viviendo. Martha, la hermana de María pensó que lo que estaba haciendo estaba bien. Ella pensó en cuidar la panza de Jesucristo y por sus necesidades físicas, era una buena cosa. Se enojo cuando ella vio a su hermana sentada a los pies de Cristo nada mas escuchándole. Ella se enojo porque la verdad estaba siendo revelada a su corazón de sus vanos esfuerzos en la cocina y no le gustó.
Cristo, entendiendo lo que había ocurrido en el corazón de Martha, le dice a Martha una verdad tan tremenda. “Martha, Martha, afanada y turbada estas con muchas cosas. Pero solo una cosa es necesaria; y María ha escogido la buena parte, la cual no le será quitada”. Lucas 10:41-42 Dios esta llamándonos a nosotros a ser como María, pero la tendencia natural es estar de prisa de mañana a noche. Tenemos que probar nuestra validez como personas con mucha actividad. Y Cristo, con una sola verdad, aplasta abajo esta filosofía.
Recuerdo hace tiempo que el Espíritu de Dios me dijo, “Es de ayuda obedecer rápido”. Yo sabía que mi obediencia no le ayudaría a Dios, sino me ayudaría a mí. Cuando usted y yo estamos listos para obedecer rápidamente a Dios esto nos ayuda. Nos ayuda a abrazar la verdad, aun cuando es doloroso. Nos ayuda en ser sensibles a Su voz y Sus sendas. Nos ayuda en ser formados como sus hijos. Hay tanto que recibimos cuando guardamos bien la puerta de la verdad.
Dios nos ha estado llamado a vivir una vida devocional amorosa y de largo plazo en esta vida. No me refiero estar sentado en un cuarto las 24 horas leyendo la Biblia u orando, sino una vida donde la expresión de nuestro corazón es primeramente para buscarle y amarle a Él. Esto significa que tenemos que decir “No” a la mucha actividad y el mucho correr por allí y por allá, para que la razón principal sembrada en nuestros corazones sea la de aumentar nuestro amor voluntario hacia a Cristo. (I changed everything, since I didn’t understand your idea, check it and see if it is correct).
Para ser un portero de la puerta de la verdad, es necesario estar en la presencia de Él, quien es la verdad para reconocer la verdad cuando nos está hablando. Cristo nos puede hablar realidades y nos puede revelar tanta profundidad a nuestras vidas, pero tenemos que estar listos y dispuestos para escucharle. Para guardar la verdad, tenemos que querer estar con Él en los atrios secretos. Entre más rápido obedecemos a este llamamiento de Dios, nos va a ayudar más. Lo más pronto que nos despojémonos de actividades engañosas, lo más pronto experimentaremos Su preciosa presencia como nunca antes.
El llamado está claro. Dios quiere llenar nuestras vidas con una comunión íntima, avivada y eficaz. Cuando la verdad de cómo estamos viviendo se revela a nuestros corazones, la tendencia humana es rechazarla, porque va en contra de lo que hemos hecho por mucho tiempo. Abraza la verdad. Guarda la puerta. Sé atraído hacia a Él.
Crece Profundo Para Correr Fuerte,
Andrés y Tiffany Bucksot